Opinión 5 de julio del 2002

Embajador Almaguer y la semilla de mostaza

Gloria Leticia Pineda
gpineda_lazarus@hotmail.com

 

El grano de mostaza”: “Cuando se siembra es la más pequeña de todas las semillas de la tierra. Pero una vez sembrada crece y se hace más grande que todas las plantas del huerto” (Marcos 4 31:32). Lo uso como símil: el embajador Almaguer está sembrando en nuestra mente perezosa y en nuestro espíritu cobarde una pequeñita “semilla de mostaza” para que se transforme en un enorme árbol de determinación y empiecen a “caer cabezas” de los corruptos. Se habla de una lista, ¡no la necesitamos! si aquí se conoce cada corrupto con su patronímico hasta “cuarta generación”.

Nos ha faltado valor, acción para auto defendernos “En arca abierta hasta el justo peca”.Nuestros ladrones se topan con “el arca abierta” de nuestra resignación, de nuestra cobardía en pelear por lo nuestro. Se oye “le roban al Fisco”, eso es un eufemismo. ¡Señor, señora, le están robando a usted!, lo que a usted le cuesta, ellos lo gastan en lujos.

La principal causa de atraso en Honduras se debe a que con tanto robo el país no tiene suficiente dinero para hacer caminar programas de salud, educación, vivienda, seguridad, proyectos de infraestructura. Somos víctimas de todo tipo de atraco: evasión fiscal, licitaciones amañadas, peculado, contrabando en un ejército de furgones, “mordidas”, lavado impune de activos, complicidad para darle proteccionismo a la estafadora Celtel y mil sinvergüenzadas más.

Nos lo han dicho en diferentes tonos: el dinero de los ladrones colocado en bancos extranjeros, triplica nuestro PNB. No nos queda suficiente para emprender programas nacionales urgentes.

¿Que los corruptos son cínicos?, ¡no!, los cínicos somos nosotros porque los premiamos por el robo: besos, apretones de manos, golpecitos en la espalda, invitaciones a nuestras casas “ ¡Qué gusto me da verte “Fulano!””A mí también (¡tonto!)”

Hay un solo remedio para la corrupción ¡Castigo y denuncia!, no podemos seguir en esta complacencia suicida. ¿Que nuestro relajo es asunto nuestro?, ¡Somos un “Estado de Derecho”, lleno de todas las glorias que lo afianzan!. Nos “rasgamos las vestiduras”: “A ese “gringo” metiche hay que declararlo “non grato”, porque atenta contra nuestra sagrada soberanía”.

“Raviber” pone de parangón que nuestros embajadores en Washington D.C. jamás le han pedido cuentas a George Bush. Hay cosas dramáticamente reales y lo voy a poner en carácter festivo “Quien paga la orquesta escoge la música”, a nosotros no nos abochorna vivir de eternos pordioseros, nada nos alcanza, somos un país fresco, desagradecido, sin rubor, etc...pero muy golilleros para gritar a lo “croupier”: ¡fuera manos!. ¿Qué autoridad nos queda para dictarle pautas a Washington? Muchos hondureños ignoran como maldice el “tax-payer” norteamericano que sus impuestos no les regresen en servicios, sino que se gasten en pueblos abúlicos que los odian. El gobierno de Washington tiene de juez una prensa seria, responsable. no nos necesita. ¿Pedirle cuentas a EUA? eso es ridículo, no lo hacen ni las grandes potencias mundiales.

Con ese falso orgullo nos encontrarán “las calendas griegas” y nuestros ladrones cada vez más sofisticados. Recordemos que hasta en el más modesto club hay un letrero que dice “Nos reservamos el derecho de admisión”, ¿qué derecho tenemos que el gobierno norteamericano finja demencia y deje a los corruptos entrar como “Pedro por su casa”? Hace ratos nos declaramos derrotados para vencer la corrupción y ahora que el embajador Almaguer viene con buena intención a querer sembrar una semilla de mostaza, para que crezca, le decimos “That is not your business!”.

Aquí nadie hace un intento serio, honesto por acabar la corrupción, además siempre ha sido gran negocio “en río revuelto ganancias de pescadores”, ya lo vimos en el gobierno de Carlos Roberto Reina: mientras él acusaba a Callejas de corrupto, varios de su equipo se lucían como finos ladrones.

¿ Qué hay de nuevo? Preguntó Lyndon Johnson “El país “tal” pide una ayuda de tantos millones, este otro ídem, tenemos cuatro más que han hecho igual pedimento. Todos ellos quieren recibirla sin ninguna intromisión en sus asuntos, especialmente que se deje por fuera los programas de “planificación familiar”. Se sentó Johnson, estiró sus piernas cuan largas eran y musitó “Entonces lo que nos piden es dinero de nuestros impuestos y arrojarlo como sal en el mar”.

Hay un líder político, su fortuna se calcula en muchos millones de dinero ”mal habido”, y si lo maquillan bien durante la campaña, será: Honorable señor Presidente de la República.

No se detenga embajador Almaguer, la gente honesta, consciente, que ama a Honduras, espera que siembre con buen éxito su semilla de mostaza para que crezca frondosa en nuestro espíritu y decir: ¡Nunca jamás!.